Corresponde a una hijuela del fundo Santo Domingo que perteneció a Domingo Ruiz Tagle Larraín y luego a su hija Concepción Ruiz Tagle García Huidobro, casada con Don Miguel Portales de donde proviene el nombre del fundo. Fue heredada por el hijo de ambos Santiago Portales, quien hacia 1924 construyó la casa.
Posteriormente la propiedad pasó a manos de Don José María Eyzaguirre de Santa Filomena que a su vez la vendió a Don Ernesto Ríos Talavera. En 1934 el fundo fue comprado por Don Joaquín Irarrázaval quien al morir 1947, lo dejó a sus 5 hijos reservando la casa patronal para su viuda, Ana Donoso. En 1991 la propiedad fue adquirida por la familia Vicuña–López quien la conserva hasta hoy.